Santo Domingo, RD.- La Fundación por los Derechos del Consumidor (Fundecom) consideró perjudicial para la producción agropecuaria nacional la disposición del presidente Luis Abinader de aplicar arancel cero a 67 productos, entre los que se encuentra el maíz, ya que de esa manera se desincentiva la producción nacional.
De acuerdo al catedrático universitario David La Hoz, presidente de la entidad defensora de los consumidores, además de que va en contra de la producción local, no hay garantía de que los importadores venderán esos productos a precios justos, salvo que se recurra a la Ley 79, de fecha 28 de noviembre de 1974, que creó una Comisión Técnica que debe hacer estudios de costos y recomendar los precios a que deban venderse bienes y servicios de primera necesidad.
En el caso específico del maíz, Fundecom recordó que el 10 de febrero de 2021 el ministro de Agricultura, Limber Cruz, había prometido que se iban a sembrar 300 mil tareas de maíz y sorgo en la región sur, en terreno propicios para esos cultivos , para satisfacer las necesidades nacionales de ese cereal, no obstante , al día de hoy, nada se hizo al respecto.
En la iniciativa enviada por el Poder Ejecutivo al Congreso Nacional, entre los bienes beneficiados de tasa cero del arancel, se encuentra el maíz en sus diversas modalidades, tanto como harina, maíz dulce y aceite de maíz.
La organización de defensa de los derechos de consumidores y usuarios, en nota de prensa enviada a este medio, sugiere al Gobierno cumplir con lo que establece la Ley 108-13, que crea a Mercadom, de donde sale Merca Santo Domingo, el cual elimina los intermediarios que encarecen el precio del producto final.
Por otra parte, Fundecom entiende que el Instituto Nacional de Estabilización de Precios (Inespre), debe convertirse en lo que dice su ley orgánica, la 526-69, en una institución estabilizadora de precios y no de distribución de funditas de alimentos a precios similares a los que se obtienen en colmados y supermercados.
Fundecom concluyó llamando al Gobierno a enfrentar la especulación y la baja en la calidad de los bienes y servicios de primera necesidad, los cuales han subido de precios en forma escandalosa y al mismo tiempo han bajado su calidad, como sucede con el café, el arroz, las habichuelas, las carnes, el aceite de diversas denominaciones, las servilletas, las galletas y otros bienes.