
Por Raúl Germán Bautista/N DIGITAL.-En medio del luto nacional por la trágica muerte de 226 personas durante el colapso del techo en la discoteca Jet Set de Santo Domingo, la reconocida cantante dominicana Natti Natasha expresó su pesar interpretando una emotiva canción dedicada al legendario merenguero Rubby Pérez, una de las víctimas del fatal suceso.
Durante su participación en el popular programa radial “El Vacilón de la Mañana”, transmitido por La Mega 97.9 FM de Nueva York, la intérprete de “Criminal” ofreció un momento profundamente sentido al cantar su tema “Y no voy a llorar”, dejando ver la vulnerabilidad emocional que atraviesa tanto ella como su equipo artístico.
“Este es un momento que merece demasiado respeto. No me siento bien emocionalmente, porque perdí personas cercanas. Esto ha afectado no solo a mí, sino también a mi equipo. Es un momento de luto que hay que respetar. Uno creció escuchando a Rubby Pérez, viendo sus shows en Santiago. Fue un artista de mucho respeto, con una voz única”, expresó Natti Natasha, conmovida por la situación.
La ganadora de múltiples premios internacionales y figura destacada del género urbano, utilizó su voz no solo para cantar, sino para rendir tributo a uno de los pilares del merengue dominicano. Su interpretación fue descrita por oyentes y fanáticos como una muestra genuina de dolor, solidaridad y admiración.
El trágico incidente, ocurrido el pasado martes, ha dejado una profunda herida en la sociedad dominicana. La discoteca Jet Set, emblemático centro de la vida nocturna en el país, sufrió un colapso estructural durante un evento musical, provocando la muerte de 226 personas y dejando decenas de heridos. La noticia ha provocado un aluvión de muestras de solidaridad desde todos los sectores, en especial del artístico.
Natti Natasha se une así al coro de voces que han honrado la memoria de Rubby Pérez, ícono del merengue, cuya potente voz y carisma lo convirtieron en una figura inolvidable para varias generaciones de dominicanos. Su legado artístico continúa vivo en cada homenaje, como el que ofreció Natasha en una de las emisoras latinas más influyentes de Estados Unidos.
Este gesto reafirma el impacto del arte como medio de consuelo colectivo, y la responsabilidad que asumen los artistas al alzar sus voces en momentos de dolor nacional.